¡QUÉ NAZCA DE NUEVO MAESTRO! - LUNES II de Pascua– 20-4-2020
¡QUÉ NAZCA DE NUEVO MAESTRO!
Jn. 3,1-8
LUNES II de Pascua– 20-4-2020
P. Ricardo
J. Vielma M.
En este lunes pascual, la palabra de Dios nos presenta
un personaje atípico, el amigo Nicodemo. Se
los presento: fiel seguidor de la religión de Israel, tal vez de avanzada edad,
fariseo, miembro del sanedrín y rabino (evidentemente la más clara
representación del judaísmo por su papel entre los suyos). En pocas palabras,
estamos ante un personaje que siendo ajeno al mensaje de Cristo, se asombra,
duda y decide interrogarle.
Me atrevería a decir que no es soberbio. Se acerca a Jesús
y lo hace de noche (Jn. 3,2). Claro
que está que se quiere ocultar, no puede demostrar a sus compatriotas de
pensamiento su interés por un nuevo Maestro. Desde las tinieblas se acerca a la
Luz infinita, tal vez no aguantaba la oscuridad de su vida, y veía en Jesús la
única salida.
Su encuentro con Cristo es interesante. Primeramente
le dice Maestro (Rabí), es decir, le
reconoce como lo hicieron los discípulos, no obstante, su fe era sólo
superficial, resalta sólo los signos milagrosos, pero no va más allá. Jesús le
invita a nacer de nuevo, pero Nicodemo no entiende. ¿Cómo un hombre viejo puede
hacerlo de nuevo?, es la pregunta del hombrecillo, y el Maestro lleva paulatinamente
su fe a una profundidad mucho mayor: ¡para entrar en el Reino de Dios es
necesario nacer del agua y del Espíritu! Es ineludible entonces ir más allá de
los límites de lo material, dejarse tocar por aquella gracia recibida en el
Bautismo, descubrir así que por haber creados por un ser infinito, redimidos y salvados
por un ser eterno.
A pesar de tener los pies sobre la tierra, nuestra
vocación consiste en que como ciudadanos del cielo transformaremos la
existencia humana en un nuevo orden, un nuevo modelo, una nueva esencia, que no
puede ver de lo meramente terrenal. Así podremos afirmar que la presencia de
Cristo en el mundo no puede ser únicamente experimentada mediante la búsqueda de
signos extraordinarios, su presencia implica también el reconocer lo
sobrenatural en el diario vivir.
¿Quieres nacer de nuevo?, ¡todavía hay tiempo!, dile
hoy al Señor: ¡QUÉ NAZCA DE NUEVO
MAESTRO! Amén.
Lectura del santo evangelio según san Juan 3, 1-8
Había un
hombre del grupo de los fariseos llamado Nicodemo, jefe judío. Este fue a ver a
Jesús de noche y le dijo:
«Rabí,
sabemos que has venido de parte de Dios, como maestro; porque nadie puede hacer
los signos que tú haces si Dios no está con él».
Jesús le
contestó:
«En verdad,
en verdad te digo: el que no nazca de nuevo no puede ver el reino de Dios».
Nicodemo le
pregunta:
«¿Cómo
puede nacer un hombre siendo viejo? ¿Acaso puede por segunda vez entrar en el
vientre de su madre y nacer?».
Jesús le
contestó:
«En verdad,
en verdad te digo: el que no nazca de agua y de Espíritu no puede entrar en el
reino de Dios. Lo que nace de la carne es carne, lo que nace del Espíritu es
espíritu. No te extrañes de que te haya dicho: “Tenéis que nacer de nuevo”; el
viento sopla donde quiere y oyes su ruido, pero no sabemos de dónde viene ni
adónde va. Así es todo lo que ha nacido del Espíritu».[1]
Excelente reflexión. Por más q seamos viejos Dios nos da la oportunidad de nacer de nuevo,... .Espiritualmente para Gloria de Dios y Gloria Nuestra. 🙏❤
ResponderEliminarQue el Espíritu Santo sople siempre en nuestras vidas para vivir reconociendo y siguiendo el camino del señor. Bendiciones padre Ricardo
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